lunes, 19 de mayo de 2008

Nuevo comienzo. No, no es una secta.


He querido aprovechar que estoy contento para dejar pequeña huella aqui, no vaya a ser que uno coja fama de maniaco-depresivo. Quizá sea mejor dejar los deshaogos y demás actos de liberación del alma para momentos y lugares en los que todo lo que queremos sacar de nosotros no caiga cerca de aquellos a los que nos gustaría salvaguardar de eso. Quizas asi fuera mejor, aunque para mi que normalmente no me quejo de las cosas, esto es una terapia, sin llegar a esa queja gratuita que tanto odio.

Ya hablé suficiente de mi.

2 comentarios:

Adriana Bañares dijo...

eres la polla

CRISTINA dijo...

Hay que evitar la queja continua, sí. A veces se corre el riesgo de entrar en resonancia, acabar en un bucle.
Pero otras veces la queja es, como tú dices, "actos de liberación del alma" y no hay nada más necesario, ni más sincero, ni más valiente...